El Poder Judicial del Estado de Puebla reclasificó como homicidio doloso el caso de feminicidio cometido contra Araceli Vázquez Barranco el 13 noviembre de 2013, decisión que provocó que se redujera la sentencia a su agresor, la expareja de la víctima.
La familia de la joven de 23 años de edad privada de la vida en el municipio de Acajete, denunció que a Javier Mauricio Díaz, se le sentenció a 35 años de cárcel.
🔴♀️ A 12 años del feminicidio de Araceli Vázquez Barranco, su mamá denunció que fue rebajada la sentencia de su agresor, Javier N., al reclasificarse el delito como homicidio.
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Amada Barranco, mamá de Araceli, informó que el imputado impugnó lo que derivó en el cambio del delito así como de la sentencia carcelaria que ahora es de 27 años, por decisión de magistradas de la Cuarta Sala Penal.
“Todavía que me quitaron lo más preciado y van a premiar a este maldito“, expresó durante una conferencia de prensa que ofreció acompañada de colectivas y asesoras jurídicas que exigen que el caso se atienda con perspectiva de género.
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Ante la reclasificación del feminicidio por homicidio doloso, la Clínica Minerva Calderón de la Universidad Iberoamericana de Puebla tramitó un amparo directo para que el Poder Judicial de Puebla eche atrás la reducción de sentencia y el cambio de delito.
Dicho juicio de amparo está programado para resolverse el próximo jueves 13 de noviembre ante el Tercer Tribunal Colegiado en materia penal del sexto circuito judicial a cargo del magistrado José Luis Moya, fecha que coincide con el doceavo aniversario luctuoso de Araceli.
♀️🔴 La Clínica Minerva Calderón de la Universidad Iberoamericana de #Puebla tramitó un amparo directo contra la reclasificación del delito, en el caso del feminicidio de Araceli Vázquez Barranco, de 23 años ocurrido en noviembre de 2013 en #Acajete. pic.twitter.com/YlZNIv0iau
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Fue en febrero de 2024, es decir, 10 años después del crimen perpetrado contra Araceli, cuando se realizó el juicio oral contra Javier Mauricio Díaz y se le condenó a 35 años de prisión por el delito de feminicidio.
La defensa legal de la familia de Araceli sostuvo que las personas que resolvieron la reducción del acusado analizaron de una manera muy limitada y sin perspectiva de género la violencia psicológica que sufrió la víctima meses antes de su muerte.
Javier, de oficio albañil, fue detenido el 28 de junio de 2014 en la localidad de Sosa, municipio de Chignautla, donde se escondía tras cometer el crimen.
En el domicilio donde fue capturado estaba su pareja e hijos, es decir, el agresor había continuado con su vida de forma regular, tras el feminicidio.
Cheli, como le decían de cariño, era la única en su familia que logró estudiar en la universidad. Estaba a punto de graduarse de Ingeniería Textil en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), y recién había comenzado a trabajar en una fábrica en la ciudad de Puebla.
Al momento del crimen, Araceli ya había terminado su relación con Javier e incluso él ya tenía una nueva pareja, pero seguía acosándola al no soportar la idea de perder el control que había logrado tener sobre ella a base de mentiras y chantajes.
La mañana del feminicidio, varios vecinos lo vieron parado afuera de la casa a la que pudo entrar sin problemas para apuñalar a la joven y huir.
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