A casi 22 horas de ser detenidas en el Zócalo de Puebla tras hacer una “iconoclasia feminista” en la fuente de San Miguel, este domingo fueron liberadas las integrantes de las agrupaciones #Malhabladas y Morras sororas histéricas e históricas.
Fue después de las 13 horas cuando representantes de la delegación de la Fiscalía General de la República (FGR) en el estado dejaron libre a la más joven de la activistas, Fernanda, quien tiene 18 años de edad.
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Su mamá y abogada la recibió con lágrimas y abrazos y ambas denunciaron agresiones en distintas partes de su cuerpo, por ejemplo, cara, cuello y brazos.
Minutos después salieron Luna, Viridiana y Victoria, en ese orden, quienes coincidieron en que fueron violentadas por elementos de seguridad y que la mayoría de sus agresores eran hombres.
La defensa jurídica de una de ellas comunicó que interpondrán denuncias contra los policías que cometieron abuso de autoridad y que las tuvieron dando vueltas en su patrulla por más de cinco horas, sin acatar la legalidad de ponerlas inmediatamente a disposición de un juez de control.
#Puebla 📣📣📣 El abogado de Victoria, una de las integrantes de @morrassororashh, anuncia que presentarán denuncias por abuso de autoridad y agresiones. Asegura que las jóvenes fueron amenazadas.
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— URBANO📍Noticia Puebla y Tlaxcala (@urbano_noticias) August 31, 2025
Agregó que las jóvenes activistas repararán los presuntos daños que causaron a la fuente, pues fue uno de los acuerdos para lograr su liberación, aunque están a la espera de que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) interponga o no una denuncia en contra de ellas.
Por su parte, Miranda Espinoza, mamá y defensora legal de Fernanda, acusó omisión de la CDH de Puebla.
Asimismo, hizo responsable al gobierno municipal encabezado por José Chedraui de cualquier represión o acción en contra de las cuatro jóvenes, quienes fueron víctimas de tortura y violencia psicológica durante las cinco horas que permanecieron incomunicadas.
En ese punto, Fernanda mencionó que los policías le arrebataron su celular para desactivar su ubicación en tiempo real y bloquearon los números de sus familiares.
Es oportuno agregar que, tras la liberación de las jóvenes, arribaron cuatro camionetas de la policía estatal y una de la Guardia Nacional a la delegación de la FGR como si se tratara de peligrosas delincuentes.
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