La violencia contra los animales sigue siendo una constante en Santiago Miahuatlán, Puebla. En lo que va del año, ya se han presentado cinco denuncias por maltrato animal, siendo el caso más reciente el de Negrita, una gatita doméstica que fue baleada presuntamente por un vecino en la colonia La Purísima.
Según relataron los dueños, tras escuchar detonaciones de arma de fuego y los maullidos de dolor, encontraron a Negrita herida dentro de su domicilio. Aunque solicitaron apoyo al 911, los elementos policiacos que acudieron se negaron a intervenir, sugiriendo a la familia que “vieran cómo impartir justicia”, una respuesta que la organización TAC Una Protección al Entorno calificó como una omisión grave de funciones.
La asociación acudió en auxilio de la familia, presentó la denuncia ante la Fiscalía General del Estado y gestionó atención veterinaria especializada para la gatita Negrita, quien aún se encuentra en estado delicado.
Catalina Aguilar, representante legal de TAC, recordó que disparar contra un animal es un delito establecido en el Código Penal del Estado, y también lo es la omisión de las autoridades ante un hecho flagrante. “Cinco denuncias en menos de cinco meses no son casualidad. Lo que ocurre en Santiago Miahuatlán es el reflejo de una política de abandono institucional hacia la vida animal”, señaló.
Ante el silencio de las autoridades municipales, ciudadanos y defensores de derechos animales han exigido la intervención directa de la presidenta Claudia Sheinbaum y del gobernador Alejandro Armenta para frenar esta escalada de violencia.
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