El retiro de la visa estadounidense a la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, y a su esposo, generó una fuerte polémica en días recientes. Este viernes, el Semanario Zeta de Tijuana reveló que la medida estaría relacionada con una investigación en curso en México y Estados Unidos por presuntos vínculos de ambos con actividades de robo de combustible, conocido como huachicol.
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De acuerdo con el medio, fuentes del Departamento de Estado estadounidense habrían confirmado que tanto la mandataria estatal como su pareja son parte de una indagatoria binacional por estos hechos.
Adela Navarro, directora del semanario Zeta, reveló que durante el curso de una investigación periodística, fuentes del Departamento de Estado de Estados Unidos confirmaron los motivos detrás del retiro de la visa a la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda.
La periodista detalló que dicha información, de carácter reservado hasta ahora, fue corroborada por instancias oficiales del gobierno estadounidense, lo que refuerza la solidez de los hallazgos publicados por el semanario.
Esta declaración se da en el contexto de un creciente interés público por los vínculos y antecedentes que motivaron la medida diplomática.
La gobernadora (y el retiro de su visa) serían un daño colateral, porque las autoridades norteamericanas lo que hacen es desactivar el círculo cercano de la persona de interés”, dijo en entrevista con Radio Fórmula.
Adela Navarro señaló que otro posible motivo por el cual las autoridades de Estados Unidos habrían revocado la visa a la gobernadora Marina del Pilar Ávila está relacionado con el reciente hallazgo de una fosa clandestina en Baja California.
El pasado 14 de abril, el colectivo Búsqueda x La Paz confirmó el descubrimiento de una nueva fosa en las inmediaciones de la carretera hacia San Juan de la Costa.
Según lo narrado por Navarro, tras el hallazgo, la gobernadora solicitó que se detuvieran las labores de excavación, una acción que no pasó desapercibida para autoridades estadounidenses y que, de acuerdo con fuentes consultadas, podría haber influido en la decisión diplomática.
La periodista relató que, tras iniciar la excavación, fueron hallados tres cuerpos. En la siguiente mesa de seguridad, la gobernadora expresó que «no querían un Teuchitlán», y días después se ordenó detener los trabajos de excavación.
Contribuyó a la revocación de la visa, según nos explicaron las mismas autoridades, el hecho que la gobernadora detuviera la excavación de un lugar donde se supone que hay una fosa clandestina”, comentó Adela Navarro.
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